El Salar de Uyuni es el desierto de sal más grande del mundo, ubicado en el suroeste de Bolivia, en el departamento de Potosí. Es el resultado de la evaporación de un antiguo lago prehistórico y se encuentra a una altitud de más de 3,600 msnm. Durante la temporada de lluvias (diciembre a mayo), el salar se cubre con una fina capa de agua, creando un espectacular efecto de espejo gigante que refleja el cielo. El recorrido se realiza en vehículos todo terreno.

Para visitar Uyuni partimos en bus desde Puno hacia La Paz un viaje que puede durar entre 10 a 12 horas, y desde La Paz a Uyuni en bus un viaje que puede durar entre 7 a 10 horas; este último tramo de preferencia se realiza de noche para descansar y amanecer en Uyuni y disfrutar del tour.

Al iniciar el tour, cerca de la ciudad de Uyuni encontramos una colección de viejas locomotoras y vagones de tren del siglo XIX que quedaron abandonados. Así mismo, en medio de la inmensidad blanca se alza la Isla Incahuasi, una colina cubierta de cactus gigantes que ofrece vistas panorámicas del salar. A lo largo del recorrido vamos a encontrar hoteles y refugios construidos casi por completo con bloques de sal.

Entre enero y febrero (estaciones cálidas) es temporada lluviosa en la zona. Pero eso no es necesariamente malo ya que el fenómeno espejo sólo se da en esta época. Si te interesa verlo, te recomendamos ir a mediados de enero o fines de febrero, ya que podrás ver los reflejos con un riesgo de lluvia más bajo. En esta época las temperaturas máximas son de 16 °C y mínimas de -3 °C en promedio.

Entre mayo y noviembre (estaciones frías) las lluvias son escasas o inexistentes. El salar ofrece entonces un aspecto parecido a un mar blanco, donde se pierde la perspectiva y ofrece muchas oportunidades de sacar divertidas fotografías jugando con los efectos ópticos que se producen. Sin embargo, hasta el mes de junio aún podemos encontrar agua para disfrutar del efecto espejo. En esta época, las temperaturas máximas de 18 °C y mínimas de 1.7 °C en promedio.